En este tiempo de decisiva presencia de mujeres en las calles, de tanto protagonismo femenino, de movimiento y de debate, recuperarlas de aquel hito histórico que marcó la historia cordobesa, argentina y latinoamericana, es tarea obligatoria.
Mujeres como Soledad García, Nené Peña y Susy Carranza siguen en las calles, en esas mismas que parieron el “Cordobazo”. Ellas marchan y exclaman causas nobles junto a trabajadoras, trabajadores y el campo popular.
Desde mediados de los años ’50 y ’60, se va produciendo una incorporación más sistemática de las mujeres al mercado del trabajo. La ampliación de las industrias en Córdoba indica un auge de las mujeres en fábricas y realizando tareas a la par de los hombres. Se incrementa el nivel de participación en el movimiento obrero, donde la intervención femenina fue vista como más periférica pero no menos importante en la marcha y en el “Cordobazo” en sí. Se peleaba desde el lugar de mujer trabajadora, por reivindicaciones relacionadas a guarderías, horas de trabajo, descansos y condiciones dignas.
Reconocernos, identificar en esas mujeres que se enfrentaron al poder, al capital, a genocidas y dictaduras, en un mundo que no es el de ahora, en donde además fueron castigadas y reprochadas por su “no ser” lo que la época esperaba de ellas, es revolucionario.
Fuente: http://www.retruco.com.ar/